| Un fosfeno es la mancha multicolor que permanece en nuestro campo visual después de observar durante aproximadamente treinta segundos una fuente de luz adecuada y que permanece en nuestro campo visual durante tres minutos.
Cuando el fosfeno está activo tenemos una ebullición neurológica excepcional, si entonces, hacemos un trabajo de reflexión, de memorización, de visualización, motriz, etcétera, transformamos la energía de la luz, fosfeno, en energía mental.
Mientras miramos fijamente la luz adecuada, su energía se acumula en el cerebro en forma de reacciones químicas potenciales. Esta energía es liberada durante la presencia del fosfeno. Como este último es un intermediario entre el mundo material y el pensamiento, su energía es más fácilmente recuperable para la actividad cerebral que la obtenida por la luz ambiente. Por tanto, se comprende que el pensamiento sea más vivo, más intenso, que se grabe mejor en la memoria, que las asociaciones de ideas alrededor de él sean más numerosas, en definitiva que se produzca una inteligencia más despierta. |